martes, 18 de agosto de 2015

Estudio de viabilidad en 5 pasos


Estudio de viabilidad en 5 pasos RDS 7.7


Suele ser una práctica habitual, el tener una idea, el inventar un objeto, el sentir que se ha encontrado una buena solución con el concepto de un nuevo producto y querer que todo ello tenga un éxito instantáneo.



Suele ser muy común invertir en ese sueño con más corazón y voluntad que estudio y razonamiento y suele ser, desgraciadamente, mucho más habitual de lo que nos gustaría el ver cómo numerosas ideas de productos y proyectos desvanecen en poquito tiempo.


Es habitual, plasmar rápidamente una idea en un papel, y más rápido aún prototipar un objeto o velozmente invertir en una primera preserie: este es el afán del instantáneo emprendedor. Pero generalmente, el querer correr de manera tan acelerada aportando una rápida respuesta al mercado con tu producto llega a la desmoralización, a la pérdida de capital, a improvisaciones costosas y a excesivos quebraderos de cabeza para poner parches a una idea original teniendo, en un elevado porcentaje de casos, que desestimar el resultado y abortar dicho esperanzador sueño.

También suele ser muy habitual el ver o compararse con esas grandes compañías en las que tienen departamentos enteros pensado en ideas, en aquellos “gurus” creadores de tendencias, en multinacionales aplicando costosas campañas de marketing para aumentar sus ventas, como en aquella pequeña empresa que empezó con una pequeña idea, y fue creciendo, creciendo y ahora es una gran estrella. 

Pues bien, quizá para no desesperarse, para no desilusionarse a mitad de camino o mejor dicho, no invertir en exceso durante el acometido, es conveniente realizar un pequeño estudio u análisis antes de empezar. Se le puede llamar anteproyecto, estudio del arte o análisis de viabilidad, enfocados desde varios tipos de disciplinas, sea un área de márketing ligándolo al mercado, sea un área de ingeniería ligándolo a un proceso, sea un área científica ligándolo más a una investigación, o sea el área del diseño que con filosofía “Design Thinking” encuentran un excelente “brief creativo” antes de iniciar. Lo cierto es que, para evitar sorpresas innecesarias, resulta una buena práctica el realizar un paso previo antes de que nuestra idea, producto o concepto empiece a coger forma real, lo que en filosofías tipo “Lean Thinking” resultaría ser la fase previa para localizar el “valor” deseado por el cliente final, permitiéndote así identificar ese flujo de acción y emprenderlo con eficiencia disminuyendo el riesgo.


En este post os resumo unos pasos que es conveniente realizar antes de empezar para que el estudio de viabilidad de vuestra idea tenga más garantía de éxito que el llevarlo a cabo por intuición e improvisación.

No se necesita un departamento, ni una empresa entera para poder realizar este tipo de análisis, pues únicamente es una filosofía de trabajo que te ayudará a que, esos sueños transformados en ideas, no se pierdan por el camino.


Estudio de viabilidad en 5 pasos - Estudio Viabilidad


1.- Conceptualizar

Describir la idea, el concepto, el producto, el camino, el sueño que se desea alcanzar en tan solo una frase y siendo lo más concreto posibles. ( ¿Qué queremos? )

2.- Comprender y Observar

           Iniciar una búsqueda (sin llegar a analizar) de:
-                                  -  Soluciones similares (existentes o semejantes)
-                                  -  Competencia directa e indirecta
-                                  -  Ventajas e inconvenientes existentes
-                                  -  Recursos posibles y recursos disponibles
-                                  -  Normativas, legislaciones y patentes

3.- Empatizar y Contextualizar

- Definir el Background (El ¿Para qué de nuestra idea?) describiendo el contexto donde ubicarlo y su funcionalidad.

- Definir el Target (El mercado, el público específico a dónde querer llegar)

- Definir las especificaciones de mejora (las ventajas e inconvenientes de nuestra idea con respecto a las demás, y con respecto a nosotros mismos pudiendo utilizar herramientas como el análisis DAFO)

- Seleccionar los recursos necesarios (ayudándose también con herramientas como el mapa de capacidades)

- Revisar la norma, la legislación, y las patentes que se verían afectadas.

4.- Definir el Objetivo

- Restringir, acotar y describir el producto de la forma más concreta posible, con la información encontrada.

- Escribir el mensaje e idea que se desea transmitir (¿Qué deseamos que se recuerde?)

- ¿Cómo se medirá y entenderá? - ¿Qué queremos que el Target haga, sienta o piense?

5.- Analizar su viabilidad

- Analizar y priorizar las características técnicas (Background y elementos obligatorios), clasificando su complejidad así como los puntos fuertes, los puntos débiles y el abanico de alternativas.

- Analizar los Factores del entorno influyentes (sean del entorno interno como los recursos, las limitaciones funcionales-formales, las posibilidades de desarrollo, etc... o del entorno externo como el mercado, la logística, las limitaciones ambientales, etc...)

- Analizar las tecnologías aplicadas (Identificar las diferentes disciplinas necesarias, mecánicas, eléctricas, térmicas,... como el nivel de complejidad de las mismas)

- Analizar los Componentes (Identificar cada parte y elemento susceptible de aparecer clasificándolo en nuevo o normalizado, complejo o simplificado, en si se puede fabricar o si existen alternativas industriales para fabricarlo, en cuáles son los que cumplen o no con los planes de inversiones y costes, y etc...)


Con estos 5 pasos a realizar, es posible obtener un análisis de viabilidad de producto o idea antes de empezar a invertir, proporcionando suficiente información sobre el verdadero problema a resolver. Cuanto más exhaustivo y concreto se haga, mucho más rentable y eficiente resultará la siguiente fase (IDEAR - Diseñar) pues más acotado, definido y analizado el concepto estará.

Los Objetivos que deben obtenerse del estudio serían:
-  
- Descripción detallada y acotada de lo que se quiere hacer

- Definición del Mensaje que se desea transmitir y clientes específicos a los que se desea dirigir

- Análisis de características, factores, tecnologías y componentes que hipotéticamente lo componen para priorizar y confeccionar la dirección del MVP (Mínimo Producto Viable).


Estudio de viabilidad en 5 pasos - Proceso D+D




Tras este estudio, y siguiendo la filosofía propuesta por “Design Thinking”, se iniciarían las fases de IDEAS, de PROTOTIPO y de TESTO con el objetivo de conseguir el Mínimo Producto Viable (MVP) adoptado por el método "Lean Startup" (desarrollado más detalladamente en el próximo post) en el cual tanto en la creación, como en la retroalimentación para las pruebas se podrán utilizaran métodos de testeo virtuales y una serie de nuevas herramientas con el fin de optimizar las inversiones de ese sueño..



Fuentes :